
Cómo cambiar un pensamiento que te limita de una forma sencilla: la relación entre pensamiento y emoción
Emoción, pensamiento y acción
Siguiendo en la línea del post anterior, donde hemos hablado de cómo el pensamiento afecta a tu vida, hoy hablaremos de la relación entre la emoción-pensamiento-acción, de este triángulo:
¿Por qué triángulo?
Porque el pensamiento lleva a una emoción que lleva a una acción.
Pero a su vez, una emoción también puede llevar a un pensamiento que lleva a una acción.
Y la acción en si misma, puede hacer con que generes un nuevo pensamiento y una nueva emoción.
¿Quieres descubrir de qué forma el pensamiento y la emoción te conducen y cómo conducirlos tú?
Pues, ¡sigue leyendo! Descubrirás una forma muy sencilla de conducir tu pensamiento.
El pensamiento lleva a una emoción
Pensamiento ————-> Emoción ————-> Acción ————-> Resultados
A veces estamos bien y felices y de repente nos acordamos de algún acontecimiento del pasado o alguien nos cuenta algo menos agradable, pensamos en ello por un momento y ¡pam! De golpe nos sentimos tristes.
Así de forma rápida y sencilla el pensamiento cambia la emoción. Para no hablar de las consecuencias de esta emoción.
Primero ocurren a nivel físico, puede que los ojos y la boca se vuelvan más decaídos y hasta los hombros. Y si la emoción sigue y no la cambiamos pues, puede que tengamos un día de esos de sofá y comida reconfortantes, el típico día de peli manta.
Esta es la “acción” a la que suele llevarnos la emoción de tristeza: a aislarnos, reflexionar, llorar. Que también está bien para la introspección.
Dicen que la emoción hay que sentirla porque si no la sientes la estás obstruyendo pero hasta un cierto punto.
Hay que ser consciente de que si sigues alimentando esa emoción con la mente de forma exagerada.
Es decir si estás todo el tiempo pensando en ello y alimentándola, estás alimentando una rueda de sufrimiento día tras día.
Quiero decir si tu mente te sigue dando argumentos para estar triste.
Porque tú tienes el poder de empezar la contra argumentación. De empezar a pensar en lo que te hace sentir bien.
Donde pones tu atención, lo que piensas y donde te enfocas, si en el problema o en la solución puede determinar tus emociones.
También el lenguaje que utilizas para hablarte a ti mismo, tu diálogo interno es muy importante.
Cómo la emoción lleva a un pensamiento
Y este es el caso cuando pasa al revés, yo ya me siento triste, por lo tanto sigo pensando cosas tristes. Y sigo actuando de forma “triste”.
Me permito sentir esa tristeza y a la vez, la estoy alimentando con el pensamiento. Estoy generando nuevos pensamientos a cada momento desde ahí.
Cómo una acción genera nuevas emociones y pensamientos
Y si sigo actuando de forma triste lo más probable es que me siga sintiendo triste y pensando de forma triste.
Una forma muy buena de romper con esta cadena es cambiando tu cuerpo.
Como por ejemplo: Ponerte en movimiento, hacer deporte, ¡bailar!
El cuerpo es el medio por el cual se expresan tus emociones así que cambiando tu cuerpo puedes cambiarlas.
Prueba a contar algo muy triste que te está pasando bailando con una música alegre, ¡es algo muy difícil!
Si tu postura, tu movimiento, tu cuerpo hablan “bien” tu emoción cambia y tu mente entiende que estás “bien”.
Es una técnica muy pero que muy efectiva.
Y al final todo se traduce en el poder ver como pensando y hablándote a ti mismo (lenguaje, trato, etc) generas emociones, como éstas afectan a tu cuerpo y te hacen actuar de una forma o de otra y como cambiando tu cuerpo, acciones o pensamientos puedes cambiar tus emociones.
Como cambio mi pensamiento y emoción
Visualiza lo siguiente:
Pensamiento————>Emoción————-> Acción———–>Resultados
Vamos a coger un pensamiento que te está limitando. ¿Qué emoción te produce? Esa es otra, que a veces no sabemos identificar correctamente lo que sentimos pero a lo mejor puede ser:
-rabia, desprecio, tristeza, pereza, aburrimiento, etc
Esa emoción ¿qué es lo que provoca que hagas?
Puede ser por ejemplo: rebelarme contra todos, estar corriendo todo el día acumulando estrés o no actuar y procrastinar.
¿Y qué resultados estás obteniendo en tu vida? ¿Qué estas ganando con esta forma de pensar?
¿Cuáles son los frutos de esta forma de pensamiento?
Y ahora vamos a cambiar la perspectiva empezando por los resultados que quieres obtener.
RESULTADOS———->ACCIÓN———–>EMOCIÓN———–>PENSAMIENTO
-¿Qué resultado quiero obtener?
-¿Qué acciones necesito llevar a cabo para obtenerlos?
-¿Qué quiero sentir para hacer esto? Por ejemplo: Empoderada, enérgica, activa, positiva ¿Cómo se sienten las personas que lo hacen?
-¿Qué pensamientos puedo tener que me hagan sentir así? ¿Qué es lo que me hace sentir empoderada, enérgica, activa, positiva? ¿Qué pensamiento es? O ¿Cómo piensan las personas que se sienten de esta forma y que actúan como yo quiero actuar?
¿Qué lenguaje puedo utilizar para hablarme a mi mismo? El lenguaje es una forma muy poderosa de cambiar la emoción.
Si podes integrar este sencillo procedimiento en tu vida créeme tienes una herramienta que lo puede cambiar todo y que te permite:
-Cambiar de perspectiva
-Poder situarte en el punto en el que estás: emoción, pensamiento, acciones y resultado
-Conocerte
-Ser consciente de cómo el pensamiento te lleva a la acción
-Reconocer tus emociones
-Gestionar tus emociones
A muchas personas que conozco les gustaría gestionar mejor sus emociones. Si es tu caso prueba con esta técnica, si la sabes aplicar estoy segura de que te puede dar buenos resultados. Y si tienes alguna duda de cómo hacerlo escríbeme en los comentarios.
Espero que te haya sido de ayuda y me gustaría que me contaras si ya conocías el triángulo emoción-pensamiento-acción, de cómo afecta tu vida y de cómo lo puedes utilizar para darle la vuelta a lo que no quieres y conseguir lo que sí quieres.
Para información más específica y para saber cuáles son los pensamientos que más te limitan, apúntate al blog para recibir la nueva guía gratuita: los 10 pensamientos limitantes: cómo cambiarlos y cómo pensar mejor de uno mismo. Cómo puedes sustituir unos pensamientos por otros y empezar a pensar mejor de ti mismo.
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